Desde hace años se viene observando desde Izquierda Unida cómo los problemas que aquejan al Puente del Realejo no solo no se subsanan sino que se acrecientan e incrementan.
El socavamiento ocasionado por el río con el incremento del caudal achacable al Trasvase Guadiaro-Majaceite, la nula intervención ante la abundante flora que lo envuelve, la actuación a instancias municipales sobre su maltrecho pavimento que lo despojó del mismo sin que se sustituyera adecuadamente con los problemas de filtración de aguas y deterioro de su arco visible en algunos puntos o la afectación del mismo por la carretera de hormigón realizada junto a él, etc. son algunos de los problemas que desde hace años vienen dañando esta muestra de nuestro patrimonio cultural y etnográfico.